Es sabido que el llamado mundo NBA o mejor dicho, la marca NBA, es una empresa que mueve millones de dólares. Esa situación la posesiona como una de las ligas más lucrativas del deporte internacional por su competitividad y por el espectáculo que ofrecen año tras año.
A partir del 2026, los ejecutivos gestionan un aumento considerable para otorgar los derechos de televisación. El proyecto económico televisivo comprende triplicar los ingresos por este concepto, monto muy significativo para lo que significa la marca NBA.
Adam Silver, ejecutivo de la NBA, el 2014 había cerrado un contrato que abarcaba 24 mil millones de dólares que comprendían las temporadas 2015 – 2016 y culminaría el 2025.
Ante la proximidad del vencimiento, existen acercamientos con las empresas Turmer Sport y ESPN con la expectativa de firmar un contrato por la nada despreciable cantidad de 75 mil millones de dólares por nueve años. Eso monto significa que las 30 franquicias se repartirían 8.300 millones por temporada, 5.700 millones más de lo que se reparten en la actualidad.
Este nuevo panorama económica repercutirá también en el límite salarial que en la actualidad es de 112 millones y que podrían negociar contratos por encima de los 170 millones con la nueva situación económica lo que significa que los jugadores podrían optar contratos super galácticos que superen los 300 millones. Montos que ponen como una de las ligas que mueve semejante cantidad de millones en el deporte.